La Asociación Argentina de Instructores de Ski y Snowboard (AAISS) denunció que Cristian Erauskin, sobreviviente de una avalancha en Bariloche, impartía clases de esquí sin contar con la habilitación correspondiente. Según la organización, Erauskin abordaba a los turistas en la playa de estacionamiento del cerro y en las pistas, ofreciendo clases a precios muy bajos.
Preocupación por la desregulación en el turismo
Guías de turismo y la AAISS expresaron su preocupación por la falta de regulación en la actividad. Señalaron que a pesar de las numerosas denuncias presentadas ante las autoridades de Catedral Alta Patagonia, el Ente Autárquico del cerro Catedral y la Delegación de Catedral, no se tomaron medidas efectivas para detener las actividades de instructores no habilitados. Joaquín Katz, miembro de la asociación, indicó que existen alrededor de 1.300 instructores habilitados, de los cuales solo 350 trabajan de manera independiente. Sin embargo, hay aproximadamente 40 personas que imparten clases sin estar habilitadas, aprovechándose de turistas que desconocen la situación.
Falta de fiscalización municipal
La AAISS destacó que el Municipio cuenta con solo tres inspectores para fiscalizar las habilitaciones, lo que resulta insuficiente para controlar la actividad. Katz sugirió que si hubiera dos inspectores en el Playpark y en el ingreso a la Séxtuple, el problema podría resolverse. Cristian Erauskin, barilochense de 52 años, es el principal señalado en la tragedia. Erauskin se presenta en redes sociales como un «coach deportivo-ontológico» y se está investigando su rol en el incidente. Según el Ministerio Público Fiscal de Bariloche, Erauskin no está prófugo ni se ha ordenado su detención, aunque se encuentra bajo investigación.
Críticas a las políticas desregulatorias
En el contexto de la desregulación, empresarios y guías de turismo también criticaron las políticas del ministro de Desregulación y Transformación, Federico Sturzenegger, y su alineamiento con las propuestas libertarias del presidente Javier Milei. Los críticos advirtieron sobre las consecuencias negativas de estas medidas para el transporte terrestre, los operadores turísticos y las asociaciones de guías. Entidades y colegios de profesionales han difundido comunicados en contra de las declaraciones del ministro, calificándolas de reduccionistas y precarizadoras.