La crisis económica en Argentina continúa afectando al sector turístico, generando un preocupante desbalance entre el turismo emisivo y receptivo. Según la Fundación Mediterránea, la salida de dólares por turismo sigue en aumento, con un saldo negativo de 1.400 millones de dólares en el primer semestre de 2024. Esto se debe en gran medida al incremento de argentinos que eligen vacacionar en el extranjero y a la disminución de turistas extranjeros en el país, lo que impacta negativamente en la balanza comercial.
Impacto económico y proyecciones para 2024
Un reciente estudio del IERAL de la Fundación Mediterránea revela que durante el primer semestre de 2024, el turismo emisivo alcanzó los 3.900 millones de dólares, mientras que el receptivo apenas llegó a 2.500 millones, dejando un déficit de 1.400 millones de dólares. Las proyecciones para el final del año sugieren que el turismo emisivo podría demandar hasta 7.500 millones de dólares, con un saldo neto negativo cercano a los 2.700 millones.
Factores que agravan la crisis
La eliminación del Impuesto PAIS en 2025 podría intensificar la crisis, ya que actualmente encarece las transacciones con tarjetas en el exterior. De eliminarse, se espera un aumento del turismo emisivo, afectando aún más la balanza comercial del sector. En septiembre, las búsquedas de turismo internacional incrementaron un 54% interanual, mientras que las de turismo interno disminuyeron un 15%.
Pérdida de empleo y medidas necesarias
La industria del turismo representa aproximadamente el 7% del empleo privado registrado en Argentina. Desde diciembre de 2023, la pérdida de empleos en el sector ha aumentado un 2,2%, lo que genera preocupación sobre su futuro. Los expertos de la Fundación Mediterránea enfatizan la necesidad de mejorar la competitividad en el mercado turístico internacional, proponiendo reformas regulatorias y fiscales para reducir costos operativos y atraer más turistas extranjeros.