Argentina terminó 2024 con un déficit turístico significativo. El turismo receptivo cayó un 8,4% interanual, mientras que el turismo emisivo experimentó un aumento notable. Según el informe de Estadísticas de Turismo Internacional (ETI) del Indec, el saldo de visitantes internacionales fue negativo en 2,1 millones. Además, el balance económico entre ingresos y egresos por turismo mostró un déficit de US$ 2.125,8 millones.
Turismo receptivo y emisivo: un análisis de 2024
Durante 2024, Argentina recibió 6,2 millones de turistas no residentes, mientras que 8,3 millones de turistas argentinos viajaron al extranjero. En términos económicos, el turismo receptivo generó US$ 3.020,5 millones, pero el turismo emisivo alcanzó los US$ 5.146,3 millones, resultando en un saldo negativo. Los turistas extranjeros gastaron principalmente en gastronomía y alojamiento, mientras que actividades culturales y visitas a parques nacionales fueron las más populares.
Impacto del contexto económico en el turismo
El economista Lorenzo Sigaut Gravina explicó que la apreciación del peso argentino, junto con la devaluación del peso chileno y el real brasileño, incentivó el turismo emisivo hacia esos países. Durante diciembre de 2024, las salidas de turistas argentinos al extranjero aumentaron un 76,4% interanual. La mayoría de los turistas argentinos optaron por destinos en países limítrofes como Chile, Brasil y Uruguay.
El turismo emisivo superó al receptivo en Argentina durante 2024, generando un déficit de US$ 2.125,8 millones. La apreciación del peso argentino y la devaluación de monedas en países vecinos impulsaron la salida de turistas nacionales.