Con el inicio de la temporada de verano a la vuelta de la esquina, Brasil se prepara para recibir una oleada de turistas argentinos, según comentó Darío Skraviuk, representante de la empresa de transporte Río Uruguay.

Las playas del sur de Brasil, de Florianópolis a Camboriú, se consolidan como uno de los destinos preferidos, en un contexto de precios accesibles y promociones de financiamiento que facilitan los planes de viaje de los argentinos tras un año de dificultades económicas.

Skraviuk confirmó que, a diferencia de lo esperado, la demanda de pasajes hacia Brasil se mantuvo estable y hasta creció en algunas temporadas, a pesar de los desafíos económicos.

“Los precios en Brasil se sostienen igual que el año pasado. Eso ha hecho que el destino sea más favorable para el público argentino que va a visitar las playas brasileñas”, explicó.

El empresario destacó que el tipo de cambio actual es ventajoso para los turistas argentinos, quienes frecuentan Brasil por su clima cálido y su cercanía geográfica.

“Seguimos operando todo el tiempo, y la gente sigue viajando, los pasajeros siguen optando por el servicio. Es gente que va por placer, por vacacionar, por trabajar”, dijo.

Ante la proximidad de las fiestas de fin de año y la alta demanda que caracteriza a esta temporada, la empresa planea aumentar sus frecuencias diarias hacia los destinos turísticos brasileños.

“Ya estamos programados, tenemos todas las unidades listas”, señaló Skraviuk. “Ofrecemos tarifas accesibles, opciones de pago en tres, seis y hasta doce cuotas, lo que hace posible que la mayoría de los pasajeros puedan costear sus vacaciones”. Según detalla, el costo de un viaje en micro semicama entre Argentina y Brasil ronda los 100.000 a 120.000 pesos argentinos por tramo.

Las opciones de alojamiento también representan un atractivo importante para los viajeros. Paquetes con estadía en hoteles de tres estrellas en el centro de Camboriú, a cincuenta metros del mar y con media pensión, pueden conseguirse por alrededor de 580.000 pesos por semana por persona, una alternativa que resulta más accesible que algunos alquileres temporales en la misma zona.

En cuanto a la infraestructura, Brasil estuvo mejorando los accesos a sus destinos turísticos más concurridos, como la autopista BR-101, que habitualmente es un cuello de botella durante el verano.

Skraviuk comentó sobre una nueva “autovía balnearia” que, una vez completada, permitirá descongestionar el tránsito y facilitar el acceso a las playas de Santa Catarina.

Esta obra proyectada, dijo, “mejorará la movilidad desde San José hasta Jombil”, permitiendo que tanto turistas como locales puedan desplazarse más cómodamente entre los balnearios.

Respecto a las expectativas de la temporada, Skraviuk fue optimista. “Va a estar inundado de argentinos en Brasil”, anticipó, revelando que los paquetes para fin de año y las tradicionales fiestas de “Réveillon” ya tienen un alto nivel de reservas.