La regulación del alojamiento temporario en Buenos Aires genera expectativas entre los hoteleros, quienes aplauden el avance hacia la formalización del sector aunque expresan la necesidad de una competencia más justa en términos tributarios. La medida, que busca limitar la informalidad, es vista como un primer paso significativo hacia el equilibrio en el mercado turístico.
Impacto en la promoción turística y la economía local
Las asociaciones de hoteleros, como AHT, CAT Baires y Ahrcc, destacan que la regularización protegerá a los turistas de estafas y contribuirá a mejorar la competitividad del destino. Además, esperan que el incremento en la recaudación del Derecho de Uso Urbano (DUU) se traduzca en una mayor promoción turística de la Ciudad. El tributo, que grava a los turistas no residentes con US$ 1,5 por noche, será destinado a Visit Buenos Aires, el ente encargado de la promoción internacional.
Reacciones del sector y expectativas a futuro
Cristina Stegmann, presidenta de AHT CABA, considera positiva la medida pero subraya que aún no se equiparan las cargas impositivas entre hoteles y alojamientos temporarios. Daniel Manzella, de CAT Baires, opina que la coexistencia regulada de ambos tipos de alojamiento es viable, y Daniel Prieto, de Ahrcc, valora el cobro del DUU como una forma de formalizar el sector. Mientras tanto, desde las agencias de viajes, destacan que la resolución aporta equidad al mercado y podría estabilizar las tarifas.
Desafíos impositivos y promoción internacional
Los hoteleros esperan que la recaudación del DUU motive una revisión de la estructura tributaria para los alojamientos temporarios. Mientras tanto, el sector turístico aguarda una reconfiguración de costos que mejore la competitividad, incluyendo la reducción de impuestos como Ingresos Brutos y el impuesto al Cheque. El objetivo es potenciar la promoción de Buenos Aires como un destino de calidad, más allá de la competencia cambiaria.