Marrakech fue el escenario de la Convención Anual de Europamundo Vacaciones, que se realizó del 1 al 4 de noviembre, reuniendo a más de 300 profesionales del turismo de 52 países. Este evento marcó un regreso emotivo a la ciudad marroquí después de 19 años, destacándose por su enfoque en la innovación tecnológica y el fortalecimiento de lazos internacionales.
Una celebración de unidad y cooperación
La convención comenzó con una vibrante Ceremonia de Apertura conocida como «Marhaba Night», donde Alejandro de la Osa, CEO de Europamundo, lideró una noche llena de simbolismo y homenaje a la unidad. El majestuoso Palais Souleiman fue el escenario de una elegante «Noche en el Palacio», ofreciendo a los asistentes una muestra de la rica cultura e historia de Marrakech. El evento terminó con una Cena de Gala en el restaurante Nouba, donde los participantes disfrutaron de la gastronomía marroquí y un ambiente festivo, respaldados por la Oficina Nacional de Turismo de Marruecos (ONMT).
Innovación tecnológica y sinergias globales
La convención puso un fuerte énfasis en la innovación tecnológica en el turismo. Destacados ponentes como Jon Hernández, experto en inteligencia artificial, y Lucía Iglesias de Microsoft, abordaron temas como la ciberseguridad y el marketing de influencers. Estas presentaciones reflejaron el compromiso de Europamundo por liderar el cambio en un sector en constante evolución. Khalid Mimi, director de la ONMT para España, Portugal y Latinoamérica, y Goro Kido, CEO de JTB Europe, matriz de Europamundo, resaltaron Marruecos como un destino clave y fortalecieron las sinergias internacionales de la empresa.
Reconociendo el valor del equipo humano
La dirección de Europamundo subrayó el valor del esfuerzo y la dedicación de su equipo, quienes son considerados el motor detrás del éxito de la empresa. «Nuestro mayor logro no son solo los números, sino las personas que hacen posible nuestro avance», destacaron. Como cierre, los asistentes disfrutaron de dos viajes post-convención: la Ruta del Desierto, una experiencia entre dunas y paisajes áridos, y la Ruta Atlántica, un recorrido por la costa marroquí desde Agadir hasta Casablanca.
